Propósito vs Misión: la diferencia que hace latir a una empresa con alma

Rubí Flores
30 may
2 Min. de lectura

En muchos muros corporativos aparece algo así como:

🧾 “Nuestra misión es brindar soluciones innovadoras y de calidad para satisfacer las necesidades del mercado…”

Correcto. Bien escrito. Profesional.Pero... ¿te dice algo realmente profundo? ¿Te hace vibrar?¿Te da ganas de despertar cada mañana para contribuir a eso?

Probablemente no.Porque una misión puede estar bien redactada,pero solo un propósito bien vivido tiene el poder de transformar.

¿Cuál es la diferencia entre misión y propósito?

🎯 La misión responde a:

➡️ ¿Qué hago?➡️ ¿A quién sirvo?➡️ ¿Con qué productos o servicios?

Es clara, operativa y muchas veces… externa.

Ejemplo:“Proveer servicios de software para la gestión organizacional con altos estándares de calidad.”

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💖 El propósito responde a:

➡️ ¿Para qué hago lo que hago, en lo más profundo?➡️ ¿Qué impacto humano quiero dejar en este mundo?➡️ ¿Qué sentido tiene mi existencia como empresa?

Ejemplo:“Inspirar una nueva forma de vivir el trabajo: más humana, consciente y conectada.”

¿Ves la diferencia?El primero informa.El segundo enciende.

**La misión la puedes copiar.

El propósito… lo tienes que parir.**

Por eso muchas empresas pueden tener misiones similares,pero no todas vibran igual.

El propósito es irrepetible.Porque nace de la historia, del dolor, del sueño, de la entraña de quien la fundó.Y cuando está vivo… se siente en todo:en el lenguaje, en la cultura, en las decisiones, en la experiencia del cliente, en el cómo te tratan desde el primer mail.

¿Y cómo una empresa con alma cultiva la vivencia del propósito?

✨ Lo recuerda a diario, no solo en el onboarding.✨ Toma decisiones alineadas a él, aunque no sean las más “rentables”.✨ Evalúa no solo resultados, sino impacto humano.✨ Escucha si lo que hace aún vibra con su “para qué”.✨ Crea espacios donde las personas puedan conectar su propósito personal con el organizacional.